Tú que ahora estás leyendo ésto no esperes encontrar relatos de calidad, ni brillantes ni siquiera originales.Es mi rincón, el lugar donde dejo fluir mi imaginación, mis sentimientos y la tapadera que guarda mi esencia.Gracias por entrar en mi rincón, siempre serás bienvenido.

mayo 08, 2011

Sentir, sólo sentir.


La despertaron unos golpes ligeros, rítmicos como piedrecitas en el cristal.

Le costó unos instantes ubicarse, no recordaba donde se hallaba. Todo le parecía extraño y en esos momentos en que todavía cabalgas entre el sueño y la vigilia no recordó que demonios hacía allí. Poco a poco recordó que se había instalado esa mañana en el bungaló de ese apartado pero lujoso complejo rural huyendo de una realidad que la asfixiaba. No había contado a nadie su intención de desaparecer durante un tiempo porque ni ella misma sabía que tomaría esa decisión hasta que apareció en el complejo hotelero después de seguir, como una señal, los letreros publicitarios que había ido encontrando a lo largo de la carretera por la que circulaba sin destino, sin finalidad. Fue un impulso y al llegar sintió que la paz que hacía tanto que no sentía había vuelto a ella.

Le asaltó un sentimiento de mal humor porque aquel dichoso ruido en su ventana le había fastidiado un sueño con el tipo al que había estado observando esa mañana en la playa mientras le acondicionaban el alojamiento. Todo un ejemplar masculino…

Se levantó como un resorte y salió al porche sin importarle el fresco de la madrugada y el aire húmedo del mar cercano, vestida únicamente con una camisa de hombre desgastada. Un recuerdo…

La oscuridad lo inundaba todo. Inesperadamente notó que una mano grande y cálida la tocaba. Le acarició el hombro y bajando por su brazo hacia su mano describió un camino de puro fuego. Ella sin pensarlo tomó su mano y desapareció con él y su moto.

No tenía que pensar, solo tenía que sentir, sólo quería sentir. Bloqueó su racionalidad y se dejó llevar. Deslizó los brazos por los costados y se abrazó a su pecho. Se inclinó apoyándose en su espalda y aspiró el olor que desprendía, puro, masculino, el tipo de fragancia que le hacía volver a sentirse mujer.

Sintió el frio cuero de su chaqueta sobre sus pechos y sintió endurecer sus pezones.

No se le ocurrió preguntar. En aquel momento lo único que experimentaba eran sensaciones.

Él alargó la mano hacia atrás y recorrió su muslo desnudo. – Agárrate fuerte- le ordenó.

Ella se estremeció tanto por el sonido de su voz como por el contacto rugoso de su mano…

 

Días después, en la ciudad, alguien leía el periódico mientras tomaba el desayuno. Le gustaba leer los breves de sucesos, esos que parecían no decir nada de gran relevancia por lo anónimo de sus personajes pero que encerraban auténticas tragedias de las que él bebía para sus novelas.


“Hallado cadáver sin identificar de una mujer joven en el bosque cercano a los acantilados del pueblo cántabro de Sonsés. Los excursionistas que la encontraron dicen que solo vestía una camisa de hombre. El cadáver, en avanzado estado de descomposición, no mostraba signos aparentes de violencia. Se encuentra en el depósito de la ciudad a la espera del resultado de la autopsia y su posible identificación.”

Dejó el diario sobre la mesa de un golpe, apagó el cigarrillo y tomando su cazadora de piel y su casco salió a quemar rueda con su moto…

 

14 comentarios:

  1. Deseos de sentir con intensidad puro doble juego, del/la acosador/a y el/la acosad@,
    donde se esconde la arrogancia del crimen perfecto. Realismo a tope.
    Enhorabuena.
    Abrazos

    ResponderEliminar
  2. Es el riesgo de VIVIR , pero es mejor disfrutar cada segundo de la vida , que verla pasar tras la ventana .
    De que servirían los sentimientos , si no nos mojamos bajo la lluvia o dejamos que nos de el sol en la cara.
    Precioso relato Marga ( como siempre )

    ResponderEliminar
  3. Quizás los momentos con más sentido en su vida. Donde solamente tenía que dejarse llevar. Trágico final para un pasión "encontrada" y "vivida".Y por contra....un escalón más para " el otro lado de la pasión".

    ResponderEliminar
  4. Gracias Aa, me ha gustado eso de la arrogancia del crimen perfecto.
    Besos.

    ResponderEliminar
  5. Conchy es el riesgo de vivir y dejarse llevar por la pasión, pero tienes razón. Sin llegar a los extremos del relato, claro, pero quien no vive alguna vez una pasión no ha vivido nunca.
    Gracias ! ( eres muy gneerosa).

    ResponderEliminar
  6. Cuál de las dos era más pasión?.
    A mi me gusta más la primera pero los impulsos son eso, y no se pueden, en muchas ocasiones, dominar.
    Gracias Anónimo.

    ResponderEliminar
  7. Realista, muy realista y escalofriante final.. Sublime como siempre, guapa

    ResponderEliminar
  8. Gracia Mehru... Me encanta que vengas por aqui.
    Besos !

    ResponderEliminar
  9. ES UNA HISTORIA LA VERDAD BONITA POR ESA PASION Y GANAS DE SENTIR CON UN TRAJICO FINAL Y HOY EN DIA DE ESOS HAY MUCHOS ,,MARGA OLE

    ResponderEliminar
  10. Gracias Anónima. Me gusta que la hayas sentido como bonita. La pasión, sea la que sea, tiene esas cosas: una atracción dificil de ignorar.
    Ole !

    ResponderEliminar
  11. Amén de la calidad literaria, que es innegable, me gusta el mensaje que envías a esas mujeres que hartas de una realidad se lanzan a la aventura ¡sin medir el potencial riesgo de sus acciones!
    Aleccionadora fábula.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  12. Gracias Julio por la visita y por el acertado comentario en cuanto a la intención.
    Lo de la calidad literaria es un regalo que agradezco pero soy una aprendiza de letras. Ya me gustaría a mi tener la mitad de tu talento...
    Gracias !!!!

    ResponderEliminar
  13. eL RIESGO es un himno!!!... menea el bullarengue !!
    logos

    ResponderEliminar
  14. jeje Logusssss...
    Es cierto eso, el que no ariesga no gana pero a veces te toca perder. Ahí tá el quid de la cuestión.
    Besets !!!

    ResponderEliminar